Tuvo una educación europea y regresó a México para casarse en plena Revolución, posteriormente tomó clases de arte en la Academia de San Carlos y después conoció a Gerardo Murillo (Dr. Atl) quién la bautizaría con el nombre en náhuatl “Nahui Olin”. Sus pinturas siempre reflejaron su personalidad, que fue moldeada desde niña por los privilegios de una familia poderosa, pues su padre diseñaba armamento militar. De igual manera y en algunas ocasiones, se notaba el interés por las tradiciones mexicanas.